Existen múltiples opciones para el manejo de la sudoración, con efecto variable, están son las opciones disponibles

1. ANTISUDORALES . Existen muchos productos comerciales que ayudan a controlar la sudoración localizada. Esta es siempre la primera opción de manejo cuando un paciente presenta sudoración excesiva localizada. Los productos desodorantes y antisudorales a base de cloruro de aluminio son los más efectivos, en particular para la sudoración axilar. El problema con estos productos es que pueden ocasionar irritación local por lo que no se recomienda su uso para la sudoración en la cara. Pueden tener utilidad para el manejo de la sudoración en manos y pies, sin embargo deben ser utilizados de manera frecuente y su efecto no siempre es predecible. Es decir, en algunos pacientes puede funcionar pero en sucede en todos. Igualmente, puede ser efectivo por períodos de tiempo determinado, pero con frecuencia pierden su efectividad con el paso del tiempo. El dermatólogo es el especialista adecuado para orientar el uso de estos productos.
2. MEDICAMENTOS: Hay algunos medicamentos que pueden atenuar la sudoración, sin embargo su efecto es variable y si se utilizan a dosis altas o por períodos largos, los efectos adversos del medicamento pueden ser mal tolerados. Pertenecen a un grupo de medicamentos llamados anticolinérgicos, como el glicopirrolato, oxibutinina y benzotropina, entre otros. Pueden ser mas útiles para la sudoración generalizada o en áreas extensas que para la hiperhidrosis localizada. Deben ser ordenados por el médico y entre los efectos adversos se encuentran: visión borrosa, retención urinaria, boca seca, cambios en el gusto y constipación. Si estos efectos adversos se presentan, desaparecen rápidamente al suspender el medicamento.
3. IONTOFORESIS: Se basa en la aplicación de una corriente eléctrica a través de la piel, la parte a tratar se introduce en agua. Es un método de efectividad variable que requiere de aplicación frecuente. No es muy constante su efecto sobre la hiperhidrosis y en quienes funciona se debe ser aplicado frecuentemente.
4. MICROONDAS Es de utilidad para la sudoración axilar únicamente, se basa en la aplicación de microondas que desfuncionalizan las glándulas sudoríparas a nivel axilar . No es un método ampliamente disponible y produce molestias locales como inflamación y dolor a nivel de las axilas.
5. BOTOX Es el tratamiento para la hipherhidrosis con toxina botulínica, frecuentemente utilizada para el manejo de las líneas de expresión de la cara y para el tratamiento de algunos problemas neurológicos. Aplicada en axilas y palmas de las manos da un buen control de la sudoración. Su aplicación es molesta pues es necesario inyectarla directamente en la axila o las palmas de las manos. Es muy efectiva para controlar la sudoración pero su efecto es transitorio, es decir, que hay que aplicarla nuevamente cada 4 a 6 meses.
6. LIPOSUCCION AXILAR Es uno de los mejores tratamientos para la hiperhidrosis que consiste en la remoción de las glándulas sudoríparas que están debajo de la piel axilar. Tiene riesgos de infección y de formación de cicatrices con retracciones a nivel de la axila. La liposucción es utilizada sólo para el manejo de la sudoración en axilas.
7. SICOTERAPIA – RELAJACIÓN – YOGA Estos tratamientos son poco efectivos para el manejo de la hiperhidrosis, pues la raíz del problema no es sicológica. Si bien el estrés puede empeorar la sudoración localizada, los pacientes con hiperhidrosis sudan en forma excesiva aún en situaciones normales donde no hay estrés. De igual manera, los ansiolíticos y medicamentos siquiátricos no son una opción de tratamiento efectiva para este problema, pues la hiperhidrosis localizada es un problema orgánico, no sicológico.
8. SIMPATECTOMÍA TORACOSCOPICA. Es el tratamiento para la hiperhidrosis más recomendado para la hiperhidrosis localizada. Logra un excelente control de la sudoración en manos, cara, axilas y cuero cabelludo, el cual es permanente, sin necesidad de procedimientos repetidos , con la mas baja tasa de recaída de todos. De igual manera es altamente efectiva para el control del flushing facial o enrojecimiento facial. Es el procedimiento recomendado para los pacientes que han intentado otros métodos sin éxito, logrando una alta tasa de curación con alta satisfacción por parte de los pacientes. Se trata de una cirugía ambulatoria, de bajo riesgo, corta duración y alta efectividad.