La hiperhidrosis y la ansiedad no están relacionadas, la hiperhidrosis no es un trastorno sicológico, los pacientes con problemas de sudoración excesiva localizada refieren molestias importantes para el saludo de manos, la manipulación de documentos de papel, el uso de instrumentos musicales y muchas otras actividades de la vida diaria por la humedad excesiva en las manos.
Otros pacientes refieren molestias importantes al hablar en público o al interactuar con otras personas porque rápidamente y de manera no controlable pueden presentar sudoración excesiva en cara o hiperhidrosis facial. Esto puede producir una sensación de inseguridad y ocasionar ansiedad en las personas con hiperhidrosis.
Para evitar estas situaciones incómodas, los pacientes con frecuencia evitan la exposición en público y van desarrollando algún grado de evitación o aislamiento social que puede ser de grado variable. El uso de medicamentos para la ansiedad, la sicoterapia, las terapias de relajación, etc. usualmente no son efectivas para el manejo de los pacientes con hiperhidrosis localizada, debido a que esta es una enfermedad de hiperactividad de las glándulas sudoríparas, no es un trastorno de ansiedad ni un trastorno de personalidad. La hiperhidrosis localizada no puede ser controlada de manera efectiva con tratamientos de conducta o de relajación. De hecho, muchos pacientes con hiperhidrosis refieren que sudan mucho aun estando en vacaciones, en actividades de descanso y relajación.
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